El autor examina las ideas, discursos e ideologías que han orientado los proyectos políticos del país a lo largo de dos siglos, así como a los hombres y mujeres que los forjaron y sostuvieron, prestando especial atención a los contextos socioculturales en los que fueron pensados, escritos y debatidos. En tal sentido, este trabajo está dirigido a quienes quieran comprender estas ideas políticas, pero también a quienes se interesen por conocer los materiales y contextos a partir de los cuales se fraguaron, así como cuál ha sido su repercusión en el debate público. Se trata, por consiguiente, de una obra de historia intelectual y de los intelectuales, que estudia tanto las ideas como las prácticas de quienes se concentraron en las actividades vinculadas al saber. El conjunto de capítulos que componen este tomo muestra que el pensamiento político chileno se inscribe en las líneas de pensamiento europeo y americano, pues participó de una serie de debates y problemas que fueron comunes a ambos continentes. Al mismo tiempo, despliega la historia de la constitución del campo intelectual y de los intelectuales como un grupo específico dentro de la sociedad chilena, corporación que si bien se ha vuelto más plural en términos sociales e intelectuales, ha alcanzado altos niveles de especialización que la han alejado del público no especialista. En este sentido, deja abierta la pregunta acerca de qué son los intelectuales y cuál es su rol en la sociedad actual.